Sinopsis:
Tuvo que perderlo todo… para encontrar al amor de su vida.
Jamás hubiera sospechado que el destino tenía reservado algo tan maravilloso para ella.
Y es que, a veces, tan solo hay que dejarse llevar.
Un lugar en ninguna parte.
Un hombre con la mejor sonrisa del mundo.
Un romance… de ensueño.
Las vidas de Lily y Clive están a punto de cruzarse por un capricho del universo. Y, de repente, dos personas que no tienen nada en común parecen estar predestinadas la una a la otra, unidas por una atracción que ni siquiera comprenden. Sin embargo, su pasado, su familia y sus propios prejuicios no se lo van a poner fácil, y tendrán que luchar con todas sus fuerzas por un amor que ninguno de los dos está dispuesto a perder, aunque a veces no tenga ningún sentido. Pero ¿quién ha dicho que deba tenerlo?
Cuando Lily Estany recibe la noticia de la muerte de su marido, su mundo entero se viene abajo. Su vida, aparentemente perfecta, se desmorona, y todos los lujos de los que disfrutaba desaparecen en un abrir y cerrar de ojos. La alta sociedad barcelonesa, a la que él pertenecía, le da la espalda sin contemplaciones. Como si eso no fuera suficiente, debe asimilar que su difunto marido no solo la ha estado engañando con múltiples amantes, sino que, además, ha dilapidado su fortuna, dejándola en la ruina. Viuda, engañada y arruinada, debe afrontar la cruda realidad. No tiene otra opción que mudarse a una sencilla comunidad de apartamentos que heredó de su abuelo, situada en una preciosa población de la Costa Brava, con el propósito de reformarla y sobrevivir de los alquileres como pueda. Se siente humillada, dolida y asustada, pero sabe que, si quiere salir a flote, no le queda más remedio que luchar por levantar ese lugar.
Clive es un hombre sociable y risueño que vive en la comunidad, siempre dispuesto a ayudar a cualquiera que lo necesite y ajeno por completo a los convencionalismos. Se pasa el día deambulando sin camiseta de aquí para allá, podando arbustos en el jardín y charlando con los agradables vecinos. Pero su apariencia afable y su inagotable buen humor esconden un pasado doloroso, causado por un divorcio traumático y una vida decepcionante que no ha llegado a ser lo que él esperaba.
En cuanto Lily irrumpe en la comunidad, revoluciona el tranquilo mundo de Clive, que recobra de nuevo la ilusión y el interés por la vida. Y es que Lily es todo cuanto él podría desear. Solo hay un problema: cree que jamás estará a la altura de una mujer como ella y que no tiene la más mínima oportunidad de conquistarla.
Al principio, a Lily le saca de quicio el carácter de Clive, su manera relajada de afrontar los problemas y su modo de hablar tan directo. No entiende cómo ese hombre atractivo, pero con pinta de neandertal, puede dedicarse todo el día a holgazanear, con una amplia sonrisa en la cara y una cerveza en la mano. Acostumbrada a un ambiente elegante y refinado, le cuesta adaptarse a ese lugar, donde no importa lo más mínimo la ropa que lleves ni el dinero que tengas. Aquello es nuevo para ella. No obstante, poco a poco, irá descubriendo que Clive es mucho más interesante de lo que parecía a simple vista y que tiene… la mejor sonrisa del mundo.
Clive y Lily provienen de entornos muy distintos y, además, ambos han tenido experiencias desastrosas en el amor. Así pues, deberán romper sus propios prejuicios y luchar con todas sus fuerzas por la persona a la que aman. De lo contrario, podrían perder la última oportunidad de ser felices. Juntos aprenderán que las apariencias engañan y que, a veces…, tan solo hay que dejarse llevar por lo que sientes.